Cada uno de ellos ha aportado a mis conocimientos algo de valor, aquello que para un docente es primordial a la hora de educar y hablo de la experiencia, lo cual valoro y agradezco profundamente, agradezco a la vida, pero sobre todo le agradezco a Dios el haberme colocado en el camino de tantos niños en búsqueda silenciosa de ayuda.
Permíteme explicarlo con una metáfora: si te detienes en la imagen de este artículo, vemos en la pecera pequeña a peces dorados, cual niños, deseosos de salir de ese ambiente minúsculo donde fueron colocados, no se sienten cómodos, les es dificil desenvolverse, asímismo muchos niños no comprenden qué tienen que hacer en la escuela, no comprenden cómo se puede leer y cómo se puede escribir y no encuentran el camino para mejorar sus aprendizajes. Esa pequeña pecera reducida, muestra cómo sienten su vida , se ven diferentes al resto de los compañeros y viven presionados por los maestros, y por los padres , asfixiados por tantas exigencias, sin poder encontrar por si solos el camino que los lleve a alcanzar los objetivos mínimos de aprendizaje.
Estos niños desean, como cualquier otro niño, dar el salto cualitativo y cuantitativo hacia la pecera más grande, para demostrar y demostrarse asímismos, que es posible aprender.
Cada uno de ellos forma parte de esta familia educativa, gracias a ellos, puedo confrontar una dificultad más de aprendizaje, puedo poner en práctica técnicas volcadas en ellos exitosamente. PLANETA SERVICIOS EDUCTIVOS, también se nutre de todos y cada uno de esos niños que se acercan a este ámbito educativo.
En esta sección quiero contarte vivencias directas con alumnos que para mi son destacados por su pequeña gran problemática, no quiero decir con ello, que el resto no es digno de destacar, si lo es, pero estos que te comento más abajo, se sacaron la estrella de oro, desde mi visión educativa.
Imagino que te emocionará , tanto como a mi, toda vez que lo recuerdo.
